Aunque de pequeñas dimensiones, Manchas de luz de luna da una impresión de monumentalidad por su rotunda composición y sus formas sumamente esquematizadas. Kuindzhi nunca trabajaba a partir de apuntes o estudios, sino que componía sus cuadros de memoria. Sus paisajes con construcciones mentales que rayan en lo fantástico y en lo simbólico. En esta obra, las ramas de los árboles están cubiertas de capas de nieve tan espesas que resultan casi antropomórficas y ello acentúa el carácter enigmático del cuadro. Su composición circular crea una sensación de espacio cerrado que contiene al mismo tiempo una tensión centrífuga. No cabe duda de que la obra de Kuindzhi iba muy por delante de su tiempo: el artista fue un precursor de las atrevidas combinaciones cromáticas de los pintores simbolistas y vanguardistas. Los dos discípulos de Kuindzhi que más cerca estuvieron del maestro, el simbolista Nicolás Roerich y el pintor realista socialista Arkadi Rilov, son buen ejemplo del alcance de su influencia en la pintura posterior en Rusia.

Kuindzhi Arjip

Kuindzhi, Arjip Ivánovich
Mariúpol (¿1842?) — San Petersburgo, 1910
Pintor, docente. Estudió en el Taller Artístico General (1865–1866) con I. K. Aivazovski en Teodosia, en la Academia Imperial de las Artes (1868– 1872). Doctor en Bellas Artes (desde 1892), miembro de pleno derecho de la Academia Imperial de las Artes (1893). Fundador de la Sociedad de Artistas (posteriormente Sociedad A. I. Kuindzhi, 1900–1931). Participó en exposiciones desde 1868. Enseñó en el Instituto Superior de Arte de la Academia Imperial de las Artes (1894–1897).