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Talla en madera, pintura
101 х 24,5 х 65
Museo Estatal de Arte Ruso. San Petersburgo
Cada rueca tradicional rusa consiste en tres partes: la base o tabla horizontal (dontse), donde se sentaba la hilandera; una pieza vertical y, sobre ésta, un panel (lopastka) al que se fijaba la fibra de lino. Desde allí se reducía la fibra textil a hilo, que se iba enrollando en el huso. Con los hilos resultantes, la mujer tejía. En las posidelki (reuniones para hilar) se utilizaban ruecas adornadas de un modo especial, que se guardaban y entregaban en herencia. El padre regalaba a la hija una rueca para su boda, en señal de buen augurio para su nueva vida familiar. No había casa campesina donde no hubiera ruecas. Casi cada localidad contaba con sus propios diseños de ruecas y sus técnicas de ornamentación mediante talla y pintura.