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Témpera sobre madera
67,5 x 52,8 x 2,4
Museo Estatal de Arte Ruso, San Petersburgo
Новгород, Свято-Духов монастырь
Nóvgorod, monasterio del Espíritu Santo.
Representado con algunos santos en el fondo y los márgenes.
La tradicional imagen a medio cuerpo de san Nicolás bendiciendo con el Evangelio cerrado en la mano izquierda corresponde a uno de los artes más extendidos en el cristianismo oriental. Este tipo de iconografía surge entre el siglo X y principios del XI. Prueba de ello es la representación más antigua que se han conservado: «San Nicolás acompañado de algunos santos» del monasterio de santa Catalina de Sinaí. Asimismo, permaneció intacto hasta finales de la Edad Media. Gozó de especial popularidad en el arte antiguo ruso. El retrato más temprano a medio cuerpo que ha llegado hasta nuestros días de este santo en la pintura de iconos rusa data de entre finales del siglo XII y principios del XIII (galería Tretiakov). En el arte de Nóvgorod, la iconografía adquiere un carácter firme antes del siglo XIII, y así lo demuestra este icono.
En los rezos a Nicolás contenidos en el libro del Octoecos, el santo se compara con un «templo sagrado» debido a la gran simpleza y claridad de las iglesias de Nóvgorod. Alrededor del cuerpo de Jesucristo se observan santos y hombres devotos, miembros de la Iglesia terrenal y celestial representados en los medallones y en los márgenes del icono. La mirada de los ángeles inclinados ubicados en el margen superior no se dirige al centro del margen, como normalmente ocurriría en una imagen de Etimasia, sino a san Nicolás, que se muestra como un altar, un ara. En la poesía litúrgica al santo a menudo se lo llama “reinante de los arcángeles”. Así, el nombre de Nicolás pudo haberse asociado con la idea de un altar eclesiástico, ya que su reliquia yacía bajo el altar principal de la catedral de Bari y sobre ella tenía lugar cada día la Eucaristía. La simbología de la imagen se enfatiza mediante la ubicación de los medallones donde aparecen los retratos de los santos. Estos, conjuntamente con las figuras de los ángeles, forman un techo de arco sobre la cabeza. Del mismo modo, la disposición de la composición se asemeja a una decoración al fresco de la parte del altar de un templo. El carácter de las imágenes contenidas en los círculos también se corresponde con pinturas murales en monumentos. Los medallones con las representaciones de los santos ocupan un lugar especial en la carga simbólica del icono, pues son los patrones de la familia de la persona que lo encarga. Tienen cierta similitud con los retratos tradicionalmente funerarios realizados en forma de «imagines clipeatae», y permiten apreciar el icono como una representación conmemorativa. Su composición está emparentada con las pinturas murales de los nichos arqueados que tradicionalmente se atribuyen en los programas de decoración del templo en memoria a los mecenas del mismo. En este contexto cabe destacar el lugar especial que ocupaba la imagen de Nicolás en la confesión religiosa rusa. La relación de dicha imagen con las ideas de resurrección de una persona y la llegada al Reino de los Cielos pudo predeterminar la originalidad de la intención iconográfica de este icono, al igual que de muchos otros.
Icono descubierto en el museo de Nóvgorod en 1926—1927 por N. Е. Davydov, en el centro de restauraciones TsGPM (Moscú) en 1928—1929 bajo la supervisión de I. E. Grabar, A. I. Anisimova, N. I. Briaguin y N. A. Baranov.